LibaciónLa mujer vierte vino en la copa, una parte del cual, la que está reservada a los dioses, será vertida sobre el suelo, mientras que el resto lo beberán por turnos cada uno de los participantes. Procediendo a esta libación, que es ofrenda y comunión, se marcan los lazos que unen a cada uno de los miembros del grupo con los demás, y se afirma la relación que une al grupo con los dioses.

Otras libaciones que también se consagran totalmente son las choai del verbo chein: «derramar copiosamente». Están especialmente destinadas a los muertos. Derramadas en la tierra o sobre un túmulo funerario, tiene la función de establecer un lazo entre vivos y muertos. Leer más.